Mamá tuvo que llamar al médico el jueves a la tarde, cuando me subió la fiebre. No es lindo tener fiebre, pero ella a veces dice que le gustaría que me portara así de bien cuando estoy sana. Yo sé que no lo dice en serio.
El doctor me revisó, cosa que no me gusta, porque lloré todo el rato, y después le dijo a mamá que tengo un "cuadro de las vías respiratorias altas, de origen bacteriano". Desde que se fue me despiertan cada ocho horas y me dan de tomar tres cosas.
Pueden ver cuáles aquí. El primero es en gotas, y es feo, pero bien feo; es para que se me vaya la tos. El segundo es menos feo pero es feo igual, aunque mamá dice que el gusto le recuerda a jarabe de frutilla. Es para la fiebre, que hoy ya no tengo. Y el último es para matar todos los bichitos y sanarme del todo, y aunque al principio no lo quiero (me lo dan al último de todo) es rico. Mamá, que ya habrán visto que prueba todo lo que me da, dice que tiene gusto a ananá.
Estos días tengo mucho sueño, duermo bastante pero también me aburro cuando estoy despierta porque no me dejan salir afuera a jugar, y también extraño ir al jardín. Menos mal que hoy me vino a visitar la Sofi de enfrente, y hasta se quedó a almorzar los ravioles de mi abu conmigo.
Mañana me llevan con mi pediatra, el mío de siempre en vez de éstos que vienen a casa pero que no son nunca el mismo: espero que me deje volver a mi jardincito y a salir a jugar afuera.
domingo, abril 25, 2004
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario